Para pruebas que tienen como objetivo la detección directa del agente de la enfermedad (PCR, qPCR, FISH) o serología relacionada con el agente de la enfermedad, no es necesario ayunar.
Para las pruebas relacionadas con el sistema inmunológico (citoquinas, marcadores inflamatorios, etc), el ayuno no es obligatorio pero la prueba no se puede realizar en muestras lipémicas o hemolíticas. Por lo tanto, se recomienda un ayuno de 8 horas o una comida muy ligera sin grasa antes de la extracción de sangre.